Misión Rescate comparte el amor de Dios en la Sierra Tarahumara
El grupo Misión Rescate de la iglesia Misión Internacional Cristo Te Ama (MICTA) regresó recientemente de su segundo viaje misionero a la Sierra Tarahumara, en Chihuahua, México. Este viaje, liderado por David Orozco, encargado del ministerio misionero, dejó profundas enseñanzas tanto para el equipo como para las comunidades que visitaron.
David Orozco compartió emocionado: "Vimos el amor que ellos le tienen a Dios. Las personas allí hacen cuatro horas de camino solo para poder asistir a un culto. Su fe y entrega nos conmovieron profundamente".
En esta misión, David estuvo acompañado por Sergio Caminos, quien también expresó su admiración por el amor de los indígenas hacia Dios, reflejado en cada encuentro. Durante su estancia, los miembros de Misión Rescate participaron en actividades evangelísticas y de apoyo, compartiendo momentos de oración y aprendizaje cultural con las familias de la región.
El equipo destacó que este viaje no solo fortaleció su fe, sino que también les permitió comprender la importancia de extender la mano a quienes más lo necesitan. Por ello, el grupo ya está planificando su próxima misión en 2025, con un objetivo aún mayor: involucrar a más personas de la iglesia y llevar más ayuda.
"Queremos motivar a nuestra congregación para que juntos podamos llevar más zapatos, ropa, cobijas y juguetes. Estas comunidades necesitan nuestro apoyo, y sabemos que con la ayuda de Dios podemos lograrlo", agregó Orozco.
La Sierra Tarahumara, conocida por su belleza natural y su cultura rica en tradiciones, también enfrenta grandes desafíos debido a su aislamiento y las condiciones climáticas extremas. Por ello, el trabajo misionero en esta región no solo lleva el mensaje de esperanza del evangelio, sino también apoyo tangible para mejorar las condiciones de vida de las familias indígenas.
Con la mirada puesta en el futuro, Misión Rescate invita a toda la comunidad de MICTA a unirse en esta labor de amor y servicio. Este llamado no solo busca recaudar ayuda material, sino también despertar en cada miembro un espíritu misionero que refleje el corazón de Jesús.